Juego como estrategia pedagógica para la enseñanza de las matemáticas: retos maestros de primera infancia

Fuente: Gallego, A. M., Vargas, E. D., Peláez, O. A., Arroyave, L. M., Rodríguez, L. J. (2020). El juego como estrategia pedagógica para la enseñanza de las matemáticas: retos maestros de primera infancia. Infancias Imágenes, 19(2). (Reseñado por el equipo del Portal).

El impacto del juego como estrategia pedagógica en general, y especialmente aplicada en el aprendizaje de conceptos lógico-matemáticos en la etapa de educación preescolar, se analizaron en este artículo desde un enfoque cualitativo. La reflexión se propuso en pos de incrementar la utilización del juego como mediador para desarrollar «habilidades cognitivas, físicas y sociales» así como «conocimientos para la vida».

Investigación
Se realizó un estudio de caso intrínseco descriptivo que se enfocó desde la perspectiva hermenéutica y se abordó en 3 fases: exploración; focalización y profundización.

La muestra estuvo integrada por 14 alumnas de prejardín y 2 docentes de una escuela enmarcada en la educación católica.

Resultados y conclusiones
De la revisión bibliográfica y los hallazgos se desprendió que «el juego es un medio de expresión y comunión en la infancia, y que (…) se puede emplear como una estrategia pedagógica que favorece los aprendizajes de las matemáticas». Igualmente, se argumentó que la propuesta lúdica propicia la adquisición intencional y no intencional de conocimientos.

Bajo este prisma se sostuvo que en la enseñanza de conceptos matemáticos se debe abordar el juego como un modo simultáneo de «aprender y divertirse».

En el trabajo se aludió al protagonismo que tiene el cuerpo y su desplazamiento en el espacio en el desarrollo del juego como actividad creadora y recreadora.
Consecuentemente, se resaltó la importancia de tener en cuenta el entorno en el que se desarrollan las actividades lúdicas, de observar la manera en que los niños interactúan de manera natural y de que los docentes se valgan de una gran creatividad en el desarrollo de las mismas.

Al hacer referencia a la relación entre el juego y el aprendizaje de los conceptos matemáticos se mencionaron los períodos establecidos por Piaget («sensoriomotor; preoperacional y operaciones concretas»).

Igualmente, se sugirió que el educador al actuar como «dinamizador del aprendizaje» propicie «interacciones texto-contexto-estudiante» y un ambiente que incentive «la creatividad y el desarrollo de las emociones».

Finalmente, teniendo en cuenta que las matemáticas ocupan un lugar destacado en la cotidianeidad se propuso que los maestros utilicen experiencias de la vida de los niños como base para generar «un aprendizaje significativo» de esta área del conocimiento.

Entre los beneficios que se le atribuyó a la implementación del juego en la enseñanza se destacó su efecto motivador de un «aprendizaje significativo», «vivencial y experimental».