Lo que fiscales y reclusos pueden aprender unos de otros (Video)
Fuente: TED Salon: Education Everywhere
En esta emotiva charla Jarrell Daniels, que se definió como catedrático «de Justicia y Educación en la Universidad de Columbia (EE.UU.)», además de mentor de jóvenes, activista y «futuro senador de Nueva York», repasó su itinerario personal desde que, siendo adolescente, ingresó al Correccional de Rikers Island «por un acto que casi le costó la vida a un hombre».
El trascendental giro que realizó en su vida lo atribuyó al innovador curso universitario «Sobre la justicia criminal», en el que tuvo la oportunidad de participar estando aún en prisión, en vísperas de salir en libertad condicional.
Educación: papel clave
El curso lo impartieron Geraldine Downey, profesora de Psicología de la Universidad de Columbia, Lucy Lang, ayudante del fiscal del Distrito de Manhattan, y contó con la participación de 8 reclusos e igual número de ayudantes de fiscal de distrito.
El punto de partida que incentivó su transformación, destacó en su relato, radicó en su descubrimiento de que no todos los fiscales eran blancos: «Recuerdo que cuando entré en la sala el primer día de clase vi a tres fiscales negros y pensé: "Guau, ser fiscal negro... ¡es posible».
A lo largo del curso, los reclusos y los fiscales compartieron sus historias de vidas lo que cambió radicalmente las concepciones y prejuicios que un grupo tenía respecto al otro. A través del trabajo en equipo comenzaron a revisar las pautas del sistema judicial y los posibles cambios.
Entre las vivencias delineadas, el educador destacó lo que le dijo uno de los fiscales: «que yo me había transformado a pesar de mi encarcelamiento y no por el encarcelamiento en sí».
Lentamente, a medida de que el curso avanzaba, se fue configurando la opinión consensuada que «mantenernos encarcelados, no beneficiaba a la comunidad ni a nosotros» y se fueron elaborando propuestas que al concluir el curso se presentaron al Dpto. de Correcciones y al fiscal del distrito de Manhattan.
Finalmente, cerró el círculo de su relato su reencuentro, diez meses después de salir de prisión, con el abogado que lo había enjuiciado, en el marco una disertación que Daniels dio en el marco de una Jornada organizada por la Policía.
Actualmente, el disertante trabaja en el marco del Consejo Joven de embajadores por la justicia en la Universidad de Columbia con jóvenes de Nueva York –algunos de ellos expresidiarios como él– promoviendo el diálogo y la colaboración, bajo la convicción del papel clave que cumple la educación: «Dicen que la verdad nos hará libres. Pero yo creo que es la educación y la comunicación».