Ser docente en tiempos de incertidumbre y perplejidad

Fuente: Pérez Gómez, Á. I. (2019). Ser docente en tiempos de incertidumbre y perplejidad. Márgenes, Revista de Educación de la Universidad de Málaga, 0 (0), 3-17. (Reseñado por el equipo del Portal).

En el contexto de la incertidumbre, la complejidad, la sociedad «líquida» y los nuevos retos que generaron los acelerados avances tecnológico de la era digital, se planteó en este trabajo la necesidad de construir una «nueva escuela, una nueva cultura pedagógica y un nuevo profesional docente».

El impacto de las emociones
A partir del reconocimiento del significativo impacto que ejercen las emociones en el aprendizaje, se sostuvo que se debería apuntar hacia el desarrollo de «capacidades cognitivas y afectivas de orden superior» en los alumnos, de cara a propiciar un pensamiento experto, comunicación eficaz, la toma de decisiones y la resolución de problemas. También se mencionó la necesidad de promover un pensamiento práctico en los docentes, tanto en el marco de la formación inicial como en la continua.

Este enfoque prioriza la «enseñanza activa, reflexiva, cooperativa y personalizada» y el análisis de la propia práctica y de los mecanismos implícitos y subconscientes que inciden en el crecimiento personal; en la manera de percibir e interpretar la realidad y en la interacción cuerpo y mente.

Nueva cultura pedagógica
La nueva pedagogía, se resaltó, viene a responder a la necesidad de preparar a los estudiantes de manera integral, para que configuren su propio proyecto de vida, como personas, ciudadanos y profesionales.

Con el propósito de incrementar las prácticas cooperativas y reflexivas del profesorado se sugirió implementar la estrategia de Estudio de Lección (Lesson Study). Asimismo, se aludió a la relación escuela-universidad, convocando a ambas instituciones a implementar el diálogo, la indagación, la experimentación y la innovación creativa.