¿Cómo arreglar una escuela fallida? Liderando sin miedo, amando con fuerza (Video)

 
Esta carismática educadora relata en esta emotiva charla su experiencia como directora de una escuela secundaria estadounidense del norte de Filadelfia, clasificada durante varios años consecutivos como «de bajo rendimiento y persistentemente peligrosa».
 
Al principio de su relato Cliatt-Wayman rememora un comentario que le hizo una vez una alumna, más de diez años atrás, respecto a un centro educativo que dirigía entonces, de un perfil similar al mencionado: «¿Por qué insiste en llamar a este lugar escuela? Esto no es una escuela».
 
Liderazgo y amor
La sentencia de la joven, que reflejó la sensación personal de la apasionada disertante, en su época de alumna, es el desafío que guía su quehacer educativo. Asumiendo su responsabilidad de líder («Siempre he creído que lo que sucede y lo que no sucede en una escuela depende del director.»), Cliatt-Wayman reunió un equipo de docentes de calidad, logrando junto a ellos y sus alumnos liberar a la escuela, en tan solo un año, de la etiqueta de «institución peligrosa» y mejorar los logros académicos: los puntajes en Álgebra y Literatura incrementaron en un 171 % y 107% respectivamente.
 
Enfocada en la necesidad de promover la motivación de sus estudiantes y despertar su esperanza y confianza en sus potenciales, la directora contó que utiliza una serie de lemas, entre ellos: «Si nadie te dijo que te amaba hoy, recuerda que yo sí, y siempre lo haré.»