Publicado:
2010
Fuente: IIEP-Unesco
El propósito de este libro fue exponer las conclusiones de una investigación llevada a cabo en el año 2001 por el Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (IIPE) sobre la temática de ética, corrupción y educación. El presente estudio fue elaborado en el contexto de la reinante austeridad presupuestaria y de la presión sobre los flujos de fondos internacionales, así como de la demanda de mayor eficacia y transparencia en el uso de los recursos públicos.
Los autores se propusieron alertar a todos los implicados en la gestión de la educación –responsables de las decisiones, planificadores y administradores– acerca de la importancia que tiene la lucha contra la corrupción en la educación. Paralelamente se plantearon proporcionarles las herramientas para detectar y valorar el problema, y orientarlos hacia el desarrollo de estrategias para impedir su práctica.
El trabajo analiza los conceptos de corrupción, transparencia y rendición de cuenta en general; examina particularmente su relevancia y magnitud en el sector educativo, y las maneras de detectar y afrontar las malas prácticas. En el capítulo dedicado a la dirección del profesorado y al comportamiento de los profesores, se advierte que la práctica corrupta en estas áreas puede tener graves incidencias financieras y en la calidad de la educación. Asimismo, se hace referencia a las tendencias organizativas actuales, entre ellas la descentralización de la gestión escolar.
Ante la crucial necesidad de crear y mantener sistemas reguladores transparentes se concluye con una serie de recomendaciones para lograrlo. También se incluyen apéndices con estándares mínimos sobre contrataciones públicas y un código de buenas prácticas para la educación trasnacional.
El informe destaca el hecho positivo de que hay sectores en cada sociedad (incluidos los países más pobres y vulnerables) que se organizan para desmantelar las prácticas de corrupción. Entre los ejemplos de casos exitosos se menciona el de Bogotá (Colombia) que logró mejorar la gestión del profesorado y reducir los gastos excesivos y superfluos.