Fuente: Tendencias Pedagógicas Nº30, 2017, 207-226. (Reseñado por el equipo del Portal).
La formación continua del profesorado se exploró en este ensayo a la luz de la marcada presencia de la cibercultura en los ámbitos social, educativo y cultural de nuestros tiempos.
Entre los principales retos que afronta la escuela de hoy se destacó la necesidad de mantenerse actualizada en cuanto a conocimientos, adelantos tecnológicos y didácticos.
La tecnología en el aula
Asimismo, se subrayó que los docentes deben dominar la tecnología e introducirla en el aula como «aliada» a los contenidos, incrementar la motivación, la interactividad, la creatividad y la autonomía de los alumnos.
Para llevar a cabo prácticas dinámicas y atractivas, el profesorado debe innovar e investigar constantemente, aludiendo a la autoformación y al saber social, y a la necesidad de valorar el saber curricular y el pedagógico.
Igualmente, se hace referencia a la construcción de la identidad profesional como ciberprofesor, contextualizada en la cibercultura.
Aula invertida
En el trabajo se sobre la metodología de aprendizaje del aula invertida (flipped classroom) según la cual, el profesor ya no es la única fuente de saberes, asumiendo un rol de orientador y organizador. Bajo esta modalidad, el alumno realiza un aprendizaje individual e independiente fuera del aula, llegando a ella con conocimientos previos que le permiten participar en la problematización de una situación planteada por el profesor.
También se menciona la pedagogía de la coasociación, formulada por Prensky (2005) que propicia el aprendizaje por medio de preguntas-guía y consecuentemente, una educación más personalizada.
Referencia
Prensky, M. (2005). Digital natives, digital immigrants. MCB University Press, 2001. Traducido por Roberta de Moraes Jesus de Souza.